Mente clara, vida plena: El poder transformador del mindfulness en la psicoterapia.
Dra. Diana Guevara
Published on September 22, 2025
Seguramente has escuchado hablar del mindfulness, esto en consecuencia de que se ha popularizado de gran manera recientemente, y pues la verdad no es para menos ante las complejas relaciones que mantenemos con nuestra existencia. Lo cierto es que esta estrategia se ha convertido en la salida para diferentes diagnósticos en la psicoterapia.
Han existido múltiples definiciones y desarrollos científicos sobre su aplicación, pero en ultimas se refiere a una técnica que pretende la observación de la realidad en el momento presente con aceptación. En ingles se ha traducido como atención o conciencia plena y vale la pena destacar que las investigaciones sobre mindfulness comenzaron en la década del setenta y desde entonces su número no ha dejado de aumentar. El crecimiento se aceleró notablemente en los años noventa y en la actualidad nos encontramos con un crecimiento casi exponencial de dichas publicaciones.
Autores como Vásquez (2016), sostienen que esta práctica está compuesta de cinco componentes:
- Atención al momento presente: Priorizar el momento presente en lugar de estar pendiente del pasado (rumiaciones) o del futuro (expectativas, deseos y temores). Mientras se medita, se puede focalizar la atención en los propios procesos internos y en la vida cotidiana.
- Apertura a la experiencia: Posibilidad de observar la experiencia sin interponer las suposiciones basadas en las propias creencias. En otras palabras, observar la experiencia como si fuera la primera vez.
- Aceptación: Experimentar los eventos plenamente y sin defensas, tal y como son. También no oponer resistencia al fluir de la vida.
- Dejar pasar: Desprenderse, desapegarse de algo a lo que nos aferrábamos. Una de las características de nuestro yo es procurar atesorar cosas, relaciones, poder, dinero. Se cree erróneamente, que cuanto más posea, cuanto más se controle, cuanto más se consiga, más feliz se será.
- Intención: Es lo que cada persona persigue cuando elije este camino: el mindfulness. Cuando se está meditando no se debe tratar de conseguir ningún propósito inmediato, simplemente hay que participar con conciencia plena de lo que se está haciendo.
Dadas las particularidades de esta técnica y su eficacia en distintas condiciones hoy por hoy su aplicación clínica ha aumentado de manera exponencial. Aunque vale la pena mencionar que al principio se redujo al manejo del dolor, el estrés y la calidad de vida, en la actualidad es considerada en el tratamiento de:
- Estrés – distrés
- Trastornos del estado de ánimo
- Trastornos de ansiedad
- Abuso de sustancias
- Trastornos de conducta alimentaria
- Trastornos de personalidad
- Dolor
- cáncer
- Enfermedades cerebrovasculares
Con lo mencionado, El mindfulness ha emergido como una herramienta poderosa en el tratamiento de la ansiedad y la depresión, ofreciendo un enfoque centrado en el presente para gestionar emociones y pensamientos difíciles. A través de la práctica de la atención plena, las personas aprenden a observar sus pensamientos y sentimientos sin juicio, lo que les permite distanciarse de patrones de pensamiento negativos y rumiaciones que alimentan la ansiedad y la depresión. Al cultivar una mayor conciencia del momento presente, el mindfulness ayuda a reducir la reactividad emocional y a desarrollar una mayor capacidad para afrontar el estrés y la adversidad, promoviendo así el bienestar emocional y la resiliencia.
